El día 10 de diciembre de 2011 tres mujeres que combaten la injusticia, la dictadura y la violencia sexual en Liberia y Yemen reciben el Premio Nobel de la Paz 2011 durante una ceremonia efectuada en Oslo. Estas tres mujeres fueron:
- Ellen Johnson Sirleaf (presidenta de Liberia. Se le reconoce el mérito de haber ayudado a su país a surgir de una guerra civil que fue especialmente brutal).
- Leymah Gbowee (activista africana encargada de organizar movimientos de paz, uno de ellos fue el que puso fin a la Segunda guerra civil liberiana en 2003. Su reconocimiento viene dado por su campaña a favor de los derechos de las mujeres y en contra de las violaciones).
- Tawakkul Karman (periodista, política y activista por la defensa de los derechos humanos que contribuyó al movimiento de la Primavera Arabe que se propagó de Túnez a Siria).
Ellas representan la lucha por "los derechos humanos en general y de las mujeres por la igualdad y la paz en particular", manifestó el presidente de la comisión del Premio Nobel de la Paz en medio del aplauso que inundó el ayuntamiento de la capital Noruega al entregarles el galardón.
Creo que este premio es una muestra más de la importante lucha por la igualdad en el mundo y especialmente pienso que contribuirá a poner fin algún día a la represión que sufren todavía las mujeres en muchos países africanos.
Las mujeres tienen y tendrán un importante papel en la historia por el establecimiento de la paz y de la democracia. Con esto quiero añadir que no podemos entender un mundo en libertad sin igualdad ya que necesitamos de ella para lograr un mayor desarrollo democrático, social e incluso económico (ya que si la mujer no participa en todos estos ámbitos estamos perdiendo un capital humano importantísimo). La desigualdad dificulta el desarrollo de un país y además su sociedad será violenta, con mucha marginación e insegura.
AMA LA PAZ Y PONTE A PERSEGUIRLA...
Fuente bibliográfica:
Gran entrada Jose Ángel, y una reflexión magnífica con la que estoy totalmente de acuerdo. Premios así suponen el reflejo de que mujeres y hombres, ambos estamos igual de coalificados para conseguir un papel importante en la sociedad actual, no debemos de infravalorar a las mujeres. La igualdad es síntoma de progreso, y tanto que defendemos sociedades progresistas y avanzadas, intentemos todos aportando en la medida de lo posible un granito de arena para que esto se lleve a cabo y se consiga; cuando esto sea cierto tendremos una sociedad mucho más avanzada y libre. Saludos:)
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